jueves, 10 de abril de 2008

De como un gato de la suerte chino acabo en el bolsillo derecho de mi abrigo


- Excuse me, sir, tiene cambio? Quiero comprar un billete de metro pero solo tengo un billete de 20$ ...
- Sorry, madame, no tengo cambio, tendra que salir a la calle a buscarlo.


No estaba dispuesta a perder 18$ solo porque las maquinas del metro de Chicago no estan preparadas para dar cambio... En menos de treinta segundos baje las escaleras y sali de nuevo a ChinaTown. Mi mision era cambiar un billete de 20$ y, frente a mi, cientos de tiendecitas parecian adecuadas para tal fin. Sus letreros sumaban miles de caracteres chinos que, vistos con distancia, parecian un gran libro suspendido en el aire; publico pero comprensible solo para algunos. Me decidi por una tienda que hacia esquina. La duena estaba fuera, apoyada en la pared, entretenida con el trasiego de gente y coches. Entre en el bazar y la china detras de mi. Inexpresivos por naturaleza, la duena se esforzo en ponerme mala cara cuando le propuse el plan. Vale, vale, ya compro algo y asi cambio el dichoso billete... Consciente de que tengo mas peligro en un bazar chino que Mc Giver en una ferreteria, me repetia a mi misma: no se trata de comprar, solo quieres cambiar 20 pavos! Despues de levantar 50 cachivaches, el precio siempre estaba puesto en la base, encontre una maravillosa e interminable coleccion de gatos de la suerte. A cual mas cursi, me dedique a levantarlos uno a uno para encontrar el mas barato de todos. Aqui esta: rosa, monisimo y por solo 1,65$! Contenta porque habia conseguido vender algo, la china me envolvio el precioso gatito en papel de periodico chino y me aseguro que me traeria mucha suerte. Me esforce en creerla y en pensar que no era un gasto sino una inversion y la unica manera de volver a casa en metro.



R de Hello Kitty.

No hay comentarios: